Hoy hemos visto (creo que ya todos) el vídeo del candidato griego del partido de extrema derecha como se le han cruzado los cables y ha agredido a otra candidata del partido comunista después de lanzarle un vaso de agua a la candidata de SYRIZA. Pero el vídeo es muy interesante también por la cantidad de expresiones que se pueden ver. ¡A cazar!
- 00:40: Justo antes de tirar el vaso de agua: enfado. Vemos la mandíbula tensa y proyectada hacia adelante y el ceño fruncido.
- 00:42: De nuevo enfado justo cuando coge el baso de agua. Vemos la tensión en la mandíbula. Pero hay un detalle muy interesante: está mezclado con alegría. fijaos en como los pómulos se elevan u la boca toma forma de U, además de las cejas más relajadas:
- 00:43: Miedo, en el hombre de azul que intenta esquivar el agua. Recordemos que un objeto lanzado contra tí es un escenario innato que dispara la emoción del miedo. Este es un ejemplo perfecto.
- 00:44: Aquí hay dos mircoexpresiones muy interesantes: la mujer de blanco de sorpresa y la de rojo... Desprecio. Por supuesto, para ella ha hecho un acto moralmente despreciable, como perder los papeles en un programa en directo y tirarle un vaso de agua.
- 00:47: La mujer de rojo pasa a la emoción de asco y la de blanco le da al nazi con un periódico. Esta reacción es muy interesante ¿por qué? Porque la emoción social del enfado se dispara cuando se es testigo de una agresión hacia otra persona, especialmente si es más vulnerable o de tu mismo grupo social (en este caso, ser mujeres y de izquierdas puede haber tenido mucho que ver con que la mujer de blanco defendiese a la de rojo). Es muy interesante también porque se enfrenta a alguien que es más fuerte, grande y violento que ella. Esto inhibiría la agresión, ya que dispararía el mecanismo de inhibición de la violencia por el miedo a la represalia, pero parece que en este caso la emoción social de protección y reproche fue más fuerte que la inhibición.
- 00:50: Igual que ha pasado con la mujer de blanco con la de rojo, el señor de azul, en el momento en el que el nazi comienza a agredir a la de blanco, reacciona de la misma manera: intentando detener la agresión, aunque sea un tipo que le saca una cabeza.
A pesar del espectáculo lamentable que representa, ha sido una suerte contar con una realización de este tipo que nos ha permitido ver las distintas reacciones y expresiones en paralelo y sobre todo, las diferentes emociones sociales de agresión y protección que han aparecido, y todo en menos de 10 segundos.
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